sábado, 26 de enero de 2008

TODO ESTÁ CONECTADO. (Primera parte, ARCHIVOS AKÁSICOS Y VIAJES ASTRALES )


La doctrina ocultista nos habla de los Archivos Akásicos, una especie de bancos de memoria cósmica donde se almacena la información de la conciencia colectiva; acciones, pensamientos, sucesos, palabras, todo se encuentra en Akasha un "mundo" superior al que sólo pueden acceder los iniciados, aquellos que logran un estado de conciencia elevado a través de la práctica de la meditación y los viajes astrales.

Los desdoblamientos (viajes astrales) pueden ser:
  • Inconscientes, es decir, sin la participación voluntaria del sujeto, casi siempre son tomados como sueños y se originan la mayoría de las veces porque la persona ha sufrido un gran trauma (un cambio muy fuerte e importante) en su vida. Puede ocurrir también que ciertas personas posean una sensibilidad mística innata que ignoran o no han querido o podido desarrollar plenamente, pero que se manifiesta de vez en cuando aunque la persona afectada lo piense como sueños ya que no comprende en absoluto que le sucede.
  • En un nivel más elevado encontramos los viajes astrales conscientes, aquellos en los que la persona sabe perfectamente que busca y cómo lograrlo a través de unas técnicas determinadas que hacen imprescindible una preparación metódica y un nivel de conciencia superior al ordinario. Es recomendable realizar este tipo de experiencias siempre acompañado por un guía, ya que podría ocurrir algún problema como que se rompiera el cordón de plata que une el cuerpo y la consciencia a causa de una mala praxis.
  • Por último tenemos los viajes astrales inducidos, que son aquellos estados de conciencia producida por otra persona normalmente a través de la hipnosis, o bajo la dirección y/o acompañamiento de un guía o maestro.
La proyección astral requiere de unas condiciones medioambientales determinadas, cuando estas se dan y el viaje se produce, cuerpo y alma o mente o cómo se quiera llamar, permanecen unidos gracias a lo que los ocultistas denominan el cordón de plata. A través de los viajes astrales la persona con el conocimiento adecuado podrá lograr el objetivo de conocer no sólo los archivos Akásicos, sino desplazarse hasta donde desee. Para regresar a su cuerpo físico es suficiente con que así lo piense.

Personas que han estado clínicamente muertas, han tenido esta vivencia del viaje astral, han comprobado como sin el cuerpo físico eran capaces de "moverse" en otro nivel, han escuchado todo lo que se hablaba en el quirofano o en el lugar donde sufrieron el terrible trauma de su muerte, han visto a sus familiares, han acompañado a su propio cuerpo hasta el hospital, de hecho el dr. Raymond Moody tiene un interesante libro titulado "Vida después de la vida" donde hace una recopilación de casos que han pasado por el trance de la "muerte" y han vuelto a vivir relatando más tarde sus experiencias.

Fotografías: Google
Para los ocultistas cuerpo y alma son dos entidades que conviven en una misma persona, Aristóteles ya nos hablaba de este dualismo, es más, decía que cuando moríamos, una parte del alma también se corrompía con el cuerpo pero había otra que permanecía inmortal. Teoría de la que siglos más tarde se apoderó la iglesia católica para afirmar la creencia en un alma imperecedera que conocería el paraíso si previamente se lo ganaba en la tierra.

Edgar Cayce disfruto del gran privilegio de conseguir entrar en esa enorme biblioteca y poder "leer" su libro de vida logrando obtener de esta manera todas las respuestas, y conocer cuales fueron sus vidas anteriores (sus reencarnaciones). Entrar en Akasha significa estar en un nivel de preparación espiritual muy elevado, requiere haber sacrificado tiempo y esfuerzo en alcanzar un nivel superior de conciencia, y la recompensa al abrir esa puerta es el conocimiento trascendental.

Quizá sólo los esoteristas crean que existe un lugar semejante, pero no es tan descabellado como en un principio parece. En próximas entradas os iré explicando como todo está relacionado, bueno, según determinadas hipótesis ;)

martes, 15 de enero de 2008

ITACA (Konstandinos Kavafis 1863-1933)


Nos pasamos la vida poniéndonos metas de todo tipo a las que nunca logramos llegar. Nos proponemos cosas que sabemos de antemano no vamos a realizar.

Sonreímos con cierta malicia cuando vemos como los propósitos que se habían hecho familiares y amigos han quedado "en agua de borrajas", y ante nosotros mismos disimulamos no reconociendo que hemos carecido de la voluntad o el sacrificio necesario para llegar a las metas propuestas.

Lejos de afearle a nadie que no logré su cometido, o de ridiculizarlo porque su intención se haya debilitado o perdido por el camino, quiero reivindicar el derecho a poder abandonar las metas cuando nos apetezca.


Lo importante no es lo que se logra sino el camino que se recorre, lo que se vive y se experimenta, lo que se conoce y se disfruta. Lo maravilloso es todo el conocimiento que la vida nos presenta a cada instante, a cada paso que damos, poco importan ya las metas, los logros, el llegar o quedarse en el camino, lo que importa es enriquecerse interiormente, crecer y sentirse vivo y compartirlo con quienes quieran aceptarlo.

Os dejo este hermoso poema de Konstandinos Kavafis, poeta griego que con sus versos explica muchísimo mejor que yo lo que intento decir. Aprovecho para daros las gracias por seguir visitando este blog y dejándome comentarios, os lo agradezco de todo corazón :)



ITACA



Cuando emprendas tu viaje a Itaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
No temas a los lestrigones ni a los cíclopes,
ni al colérico posidón,
no hallarás tales seres en tu camino,
si tu pensar es elevado, si selecta
es la emoción que toca tu espíritu y tu cuerpo.
Ni a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al salvaje Posidón encontrarás,
si no lo llevas dentro de tu alma,
si no es tú alma quien ante ti los pone.

Pide que el camino sea largo.
Que sean muchas las mañanas de verano
en que llegues -¡con qué placer y alegría!-
a puertos antes nunca vistos.
Detente en los emporios de Fenicia
y adquiere hermosas mercancías,
nacar y coral, ámbar y ébano
perfumes deliciosos y diversos,
invierte cuanto puedas en perfumes voluptuosos y delicados.
Visita muchas ciudades egipcias
y con avidez aprende de sus sabios.

Ten siempre a Itaca en tu pensamiento.
Tu llegada allí es tu destino.
Mas no apresures nunca el viaje.
mejor que dure muchos años
y a tú vejez arribes a la isla,
enriquecido con cuanto hayas ganado en el camino
sin esperar a que Itaca te enriquezca.

Itaca te brindó tan hermoso viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
Pero no tiene ya nada que darte.

Aunque la halles pobre, Itaca no te ha engañado.
Así, sabio como te has vuelto, con tanta experiencia,
entenderás ya qué significan las Itacas.